Automotivación, la habilidad más poderosa

Automotivarse es INFLUIR en tu estado de ánimo. Esta habilidad es cómo un motor potente que nos produce la energía para alcanzar objetivos o metas.

Conócete, acéptate, supérate

La motivación está presente en todas las facetas de la vida, pero cuando hablamos de automotivación es algo diferente ya que es la motivación hacia uno mismo.

Automotivarse es darse a uno mismo las razones y el entusiasmo con el que provocar una acción o un determinado comportamiento. Con esta habilidad se adquiere una fuerza interna que será el motor que te impulsa constantemente hacia adelante, consiguiendo la energía vital necesaria para realizar esfuerzos extraordinarios y lograr tus metas y objetivos.

 Es fundamental que cualquier persona que busque mejorar y gestionar su vida comprenda las consecuencias positivas que la automotivación aporta

Todos cargamos con experiencias del pasado que nos han modelado hasta ser lo que somos hoy. El problema aparece cuando dejamos que esas experiencias del pasado, que en algún caso pudieron ser dolorosas, nos condicionen. No dejes que ese dolor esclavice tu vida, ya que poco a poco acabará transformándose en miedos. Aprende lo que puedas de esa mala experiencia que viviste y sigue adelante. Esa actitud es la que va a ayudar a tu automotivación.

Hay muchas cosas positivas que están ocurriendo en el mundo, sé consciente de esto, ya que eso favorecerá el poder construir una actitud de esperanza y confianza

Lo que nos diferencia a unos de otros es la capacidad de luchar tolerando la ansiedad de la espera, de postergar la gratificación,  en lugar de abandonar cuando nuestro objetivo nos supone un esfuerzo personal.

Compréndete, comprométete, perfecciónate 

Cuando la motivación nace de nuestro interior nos fortalecemos. El hecho de que pensemos que una cosa es agradable hacerla es lo que hace que esa cosa sea agradable, y no la cosa en sí. Nuestros pensamientos condicionan las acciones que realizamos y por tanto nuestra vivencia respecto a ellas. El cómo vives las cosas se genera en ti, no depende ni está sujeta a terceras personas, es lo que te impulsa en tu vida.

Conectar con el  sentido de por qué hacemos lo que estamos haciendo es muy efectivo a la hora de mantenernos motivados. Hace falta TENER MUY CLARAS NUESTRAS METAS si queremos sobrevivir a los estímulos externos, muchos de ellos pesimistas. Nosotros mismos somos la pieza clave para fomentar nuestros niveles de motivación.

Para tener éxito y conseguir nuestros objetivos tenemos que ser perseverantes y no rendirnos ante los obstáculos que se presenten, nuestro esfuerzo merecerá la pena y se verá recompensado. Recapacitemos en si tenemos el nivel de estimulación adecuado para abordar esos objetivos, cuando en el trabajo hacemos las cosas porque las tenemos que hacer, porque nos gusta lo que hacemos y disfrutamos con ello, o porque no nos queda otra y sólo nos anima el dinero que vamos a ganar haciéndolo.

Si cuando nos planteamos una meta nos vamos animando con cada parte del camino recorrido, si los problemas o contratiempos los vivimos como un desafío, si cuando he tenido un éxito me siento orgulloso de mí mismo aunque no me lo destaquen otras personas, si tengo claro que las cosas que requieren un esfuerzo son las que realmente merecen la pena y después más valoras, estaremos más cerca de la motivación necesaria para conseguir nuestras metas en la vida.

Respecto a la motivación en el trabajo está claro que el bienestar laboral está íntimamente relacionado con la productividad

Según muestran algunos estudios, más del 80% de los trabajadores no son felices en el trabajo y casi la mitad de las empresas, el 46%, no hacen nada para mejorar la situación de sus empleados a pesar de la evidente relación entre el bienestar laboral y el rendimiento profesional.

Todo cambiaría si dejáramos de quejarnos. Puede parecer una obviedad pero esta es una de las claves para ser feliz. La mejor manera de ganarle la batalla a la frustración es dejar de pensar constantemente en lo que nos gustaría tener y no tenemos. Ser ambicioso puede ser  bueno pero con control, para no caer en la insatisfacción.

Gozar de un buen ambiente en el trabajo es uno de los factores que más inciden sobre el bienestar de los empleados. Tanto lo bueno como lo malo se contagia así que, rodéate de personas positivas, vitales y entusiastas. Mejorará tu estado de ánimo y la manera de enfrentarte a la vida.

Convirtamos el optimismo en nuestra bandera y recordemos que estar motivado es una cuestión de actitud.

José María Torres

Presidente ejecutivo del grupo Numintec
Premi Fundació PIMEC als Valors d’empresa 2017

Deja una respuesta

Your email address will not be published.

*

Previous Story

Conoce la documentación para la exportación de vino y cava en el extranjero

Next Story

Paraguas guardado y menos frío: predicción meteorológica del 18 al 24 de noviembre 2017

Latest from Competitividad