Últimamente estamos recibiendo inputs por diversos medios sobre las consecuencias y cambios que la digitalización está provocando en varias dimensiones como la social, económica, y cultural; pero sin duda, la que más se está debatiendo desde diversos ámbitos por su repercusión, es la que tiene que ver con la transformación del mercado de trabajo .
Cuando hablamos de mercado de trabajo lo hacemos no sólo en relación a la ocupación, es decir, en los lugares de trabajo que parece que se crearán a raíz de la digitalización; sino también en relación a los cambios que esta llevará en las formas de contratación en la formación .
Si nos centramos en el empleo, un estudio realizado por Randstad Research prevé de aquí a 2022, la creación de 1,25 millones de puestos de trabajo en España ligados a profesiones STEM (ciencia, tecnología, ingeniería y matemáticas).
Sin embargo, el problema reside en la tendencia negativa del número de alumnos matriculados en estas disciplinas, concretamente una reducción porcentual en 5 puntos durante los últimos 7 años en nuestro país. Esto provoca ya en la actualidad un gap entre oferta y demanda , en posiciones tales como perfiles técnicos, especialistas en oficios y operarios; aparte de las que se demandarán a muy corto plazo, más relacionadas con la tecnología ligada a Big Data, inteligencia artificial, cloud, internet de las cosas o robótica; todas ellas clave en el futuro del mercado de trabajo.
https://www.pimealdia.org/la-intel%C2%B7ligencia-artificial-als-rrhh-un-futur-proper/
Competencias más demandadas 2020
Si atamos estas nuevas profesiones con la preparación académica de las personas, nos encontramos con una necesidad del mercado laboral de una base teórica que claramente viene determinada por el propio sistema educativo, pero también se requieren claramente una serie de competencias transversales que la complementen, como las que identifica el mismo estudio de Randstad Research ( Competencias más demandadas 2020):
- Resolución de problemas
- Pensamiento crítico
- Creatividad
- Gestión de personas
- Coordinación
- Inteligencia emocional
- Toma de decisiones
- Orientación de servicio
- Negociación
- Flexibilidad cognitiva
Teniendo en cuenta estas previsiones, la recomendación sería por un lado focalizar la inversión de la educación en el desarrollo de estas competencias , y por otro, iniciar la orientación profesional a la escuela .
Para las generaciones que ya nos encontramos en el mercado laboral, sería recomendable estar abiertos a las oportunidades de formación y actualización continua en las habilidades digitales y la tecnología
Un último dato que creemos aportará motivos para tomar en serio la “revolución tecnológica”, es que 65% de los niños y niñas que ahora cursan primaria trabajarán en empleos que hoy no existen , según pronostican varios informes , entre ellos el “ Informe del futuro de los puestos de trabajo ” presentado en el Foro Económico Mundial de Davos. Y eso será dentro de sólo 10-15 años!
