El 21 de marzo del 2023 el Gobierno de la Generalitat de Cataluña ha aprobado el Plan nacional para la erradicación del amianto en Cataluña (PNEAC), que ha de permitir lograr el objetivo fijado por la Unión Europea de retirar el amianto de todos los edificios públicos antes del 2028 y del conjunto del territorio antes del año 2032.
El PNEAC establece un plan de actuación que incluye la identificación de materiales con amianto, su retirada y gestión adecuada, así como la formación y la sensibilización de los profesionales implicados y la población en general. Además, también se establecen medidas para la inspección y el seguimiento de los trabajos de retirada del amianto.
¿Cómo afectará la implementación de este plan las mipymes?
Las micro, pequeñas y medianas empresas pueden tener una afectación más grande que las compañías de más dimensión por varias razones, pero principalmente por la inversión económica que tengan que llevar a cabo para la retirada y gestión del material. También se debe tener en cuenta la interrupción de la actividad, que en muchos casos será indispensable para llevar a cabo el proceso de retirada de amianto, y esto podría suponer dificultades en las mipymes por la necesidad de recolocar el personal o de redirigir la producción. Hará falta, además, fomentar la implementación de medidas de prevención en el puesto de trabajo para reducir la exposición al amianto y su eliminación segura.
Sin embargo, es importante destacar que el PNEAC también puede representar una oportunidad para las mipymes. La retirada de amianto puede mejorar la salud y la seguridad de las personas trabajadoras, así como la imagen y la reputación de la empresa. Además, si después de la retirada de amianto se instalan placas fotovoltaicas, esto puede hacer mejorar la eficiencia energética y la sostenibilidad de los edificios, lo que puede tener un impacto positivo en los costes a largo plazo.
Las mipymes pueden minimizar estas afectaciones llevando a cabo varias medidas como, por ejemplo, planificando el proceso de retirada de amianto con antelación para reducir el impacto en la producción y la actividad de la empresa. Esto puede incluir la planificación de la retirada en periodos de menor actividad o prever medidas para minimizar la interrupción de la actividad.
Finalmente, se debe tener en cuenta que se pueden solicitar ayudas o subvenciones públicas para la retirada del material que contenga amianto y que, en el marco de la Estrategia Catalana de Seguridad y Salud Laboral 2021-2026, desde la Secretaría General del Consejo de Relaciones Laborales se pone a disposición del tejido empresarial un espacio web donde se pueden encontrar recursos sobre el amianto y otras materias relacionadas con seguridad y salud laboral.
Josep Maria Cuberes
Técnico en prevención de riesgos laborales de PIMEC