Entrevista a Koldo Crespo, socio director y fundador de Alotark
Vuestra empresa ofrece servicios de arquitectura e ingeniería a las empresas. ¿Cómo podéis ayudar a las pymes en materia de energía para bajar costes y ser más sostenibles?
De inicio, lo más relevante es conocer el detalle de cómo funciona cada empresa y cuál es el punto de partida energético, como tenemos los cuadros eléctricos y las máquinas consumidoras en general. Tenemos que analizar todas aquellas zonas de fisura que se puedan arreglar, poniendo el foco en la actividad de la pyme y, por lo tanto, su necesidad en materia de consumo energético.
Hay pymes que tienen organizada su actividad en turnos de 24 horas con consumos diurnos y nocturnos, y otras que tienen una actividad más estándar -como es el caso de los oficinas- con horarios de 8 horas. Una vez analizados estos conceptos, podremos establecer cuáles son las medidas que podemos implementar y que son de dos tipos, con inversión y sin inversión. Nuestra apuesta es empezar siempre implementando medidas sin inversión; puesto que la experiencia nos dice que en la misma inercia de funcionamiento de la actividad hay mucho margen de mejora en cuanto a ahorros energéticos. Se puede llegar a lograr un ahorro de hasta el 20%, implementando medidas de funcionamiento que no requieren inversión. Después, podemos pasar a otra fase de implementación de medidas de ahorro energético con inversión que afectaran, entre otros, a los equipos consumidores y al envolvente del edificio.
Nosotros proponemos un servicio de gestión energética que se alimenta con los propios ahorros generados y que no requiere inversión inicial para la empresa. De tal manera que cubrimos nuestro servicio con los ahorros conseguidos, es un sistema de ahorro compartido.
¿Qué beneficios supone para las empresas ser autosuficientes o usar energías renovables a corto y largo plazo? ¿Qué tienen que tener en cuenta si quieren hacer esta mejora?
Los beneficios son muchos: ahorro económico, contribución al cuidado del medio ambiente, mejora de la reputación empresarial… Las empresas tienen que analizar cómo consumen: donde están los consumos, en qué momento se producen y qué capacidad tienen para implantar energías renovables en el edificio, ya que en muchas ocasiones hay limitaciones. No es lo mismo disponer de una nave industrial que de un local comercial en una ciudad y, por lo tanto, disponer de un trocito en la cubierta del edificio. En cuanto a las amortizaciones de la inversión, estamos en torno a los 4 o 5 años. La situación hoy en día es que la amortización se produce en un periodo muy rápido.
Teniendo en cuenta los gastos que supone digitalizarse e innovar, ¿en qué medida recomendáis a las pymes la implantación de nuevas tecnologías?
La digitalización es el reto fundamental que tienen las empresas hoy en día, es el pasaporte hacia el futuro, sin ella es muy difícil poder avanzar en la dinámica que el mundo está avanzando. El riesgo que corremos las empresas que no abordamos de manera definitiva el proceso de digitalización es muy alto. La digitalización enfocada en el espacio de trabajo puede ser progresiva y gradual, no es necesario plantear grandes inversiones. Digitalizar el espacio de trabajo, poder medir cómo funciona, poder adecuar sus estándares de confort… es algo que se puede hacer de una manera relativamente sencilla, y en materia de energía, medir que hacemos, controlar lo que consume cada aparato y corregir aquello que no funciona de manera digital, está al alcance de todas los empresas.
¿Qué consejos daríais a una empresa de pequeña dimensión en relación con el teletrabajo para que sea una modalidad eficaz y efectiva?
Les recomendamos que miren cómo funcionen las empresas grandes. Hoy en día el teletrabajo se está instaurando con presencia del 60 u 80% del tiempo. Esto lleva a las empresas grandes, que tienen muchísima demanda de superficie de trabajo, a reducirlo y a reducir costes también. Aun así, hay quien plantea que la convivencia de la plantilla es muy importante para conseguir los resultados de eficiencia, convivencia del equipo, motivación conjunta y asimilación de los valores de la empresa. Creo que estamos en un momento de análisis de tendencias para ver qué es necesario hacer.
En el caso de las empresas pequeñas creemos que no es tan relevante la reducción de la demanda de superficie. No es un elemento que asfixie tanto la cuenta de explotación, por lo tanto, el criterio tendría que ser más de funcionamiento. Si las pymes tienen dudas, lo primero que tienen que hacer es ver cómo funcionan sus equipos de trabajo, cómo es la tecnología que utilizan, cómo son los softwares, y el acceso a las sales de reuniones, tanto presencial como virtual, de forma que se puedan establecer unos parámetros de eficiencia y de rendimiento óptimos en un contexto donde no tenemos la presión de la optimización del espacio. No hay soluciones universales, hay que entender la forma de trabajar de la empresa.
En el desarrollo de vuestra actividad innováis constantemente. ¿Qué es el Alotark I+Dreams?
Hemos trabajado en proyectos muy singulares que nos han obligado a estudiar mucho y a no olvidar nunca el esfuerzo que supone actualizarse e innovar. En este sentido, en nuestro ADN siempre ha estado presente la innovación. Hemos querido bautizar Alotark I+Dreams a un conjunto de elementos y proyectos que hemos desarrollado para nosotros mismos y para otros clientes. Desarrollamos varios modelos de negocio que están en funcionamiento o, en otros casos, a la espera de una ronda de inversión. Actualmente, estamos trabajando en una nueva área de negocio: las experiencias inmersivas aplicadas al retail y centradas en generar experiencias memorables para el usuario, sea empleado, colaborador o cliente.